
----------
- Te cortas el pene y lo arrojas lejos (preferiblemente contra la vecina, por tentadora).
- Ignoras la erección y desayunas tranquilamente.
- Te presentas en casa de tu vecina y solucionáis el problema como personas civilizadas.
Tú eres el protagonista de estas historias, elige entre millones de soluciones diferentes.
14 comentarios:
¡¡¡Eres un puto crack, tío!!!
:-D :-D
Genial! clap, clap, clap
Me encantó! Espero impaciente "¡Eres un sacerdote del Opus Dei!"
Eh, menuda sorpresa, qué divertido ¿sabes que ahora los libritos son de color blanco?
yo estuve enfermo de sexo.
la idea es muy buena...
espero q la continues...
te dejo algo (una mascota) en mi blog a ver si te anima a seguir.
AMÉ tu blog. :) completalo, dale.
antisemita, ojala que te mueras pronto.
Ay, esa comprensión lectora, señor anónimo...
El azar de los estúpidos me ha hecho conocer tu blog. Mereció la pena.
excelente blog, felicidades.
Me encanta este libro, me he reido MUCHO leyéndolo.
A ver si se anima a terminarlo. Y ya puestos, escribir uno nuevo para la colección.
Un saludo.
Creo que me voy a hacer rabino. Felicidades!
Publicar un comentario